Para comprar un ordenador, lo primero en lo que tenemos que
fijarnos será en el microprocesador o CPU, ya que cuantos más núcleos tenga,
más velocidad tendrá. Los principales fabricantes son Intel y AMD, siendo
mejores los Intel. Esto no fue siempre así, puesto que hasta la llegada del
Intel Core, los procesadores de AMD eran mejores. Intel nos muestra una gama de
ordenadores clasificada de una a cinco estrellas, pero siempre habrá que buscar
el más adaptado a nuestras necesidades como usuario, es decir, no tenemos
porque comprarnos un ordenador con el mejor CPU del mercado si no vamos a
utilizar el ordenador para cosas muy especiales.
Ahora nos fijaremos en la memoria RAM, cuya capacidad,
cuanto mayor sea, mejor nos vendrá. Debe de ser al menos de 4GB de memoria y
del modelo, por lo menos, DDR4, mientras que las RAM de los ordenadores de
sobremesa son las DIMM y las de portátiles SO-DIMM.
Los discos duros también son importantes en cuanto a su
capacidad, ya que siempre van a acabar llenándose y, hoy en día, ya estamos en
varios TB de memoria. En cuanto a su tipo de tecnología, encontramos los de
tecnología magnética o HDD, que tienen más memoria en general, y los de estado
sólido o SDD, más ligeros. Los HDD, para que las aplicaciones multimedia se
reproduzcan de forma adecuada, deben tener al menos 7200 rpm (revoluciones por
minuto). Por último, hay que ver el tipo de conexión del disco duro, que debe
ser por lo menos de tipo SATA. Si el disco duro se llena, lo mejor es
complementarlo con un disco duro externo conectado por un portal USB.
En cuanto a la tarjeta gráfica, tenemos dos fabricantes,
NVIDIA y AMD, aunque Intel también las hace, pero de peor calidad. Son mejores
las NVIDIA, con el modelo GeForce y, dentro de esa familia, es mejor elegirla a
partir del modelo GeForce 730. Sin embargo, para ordenadores portátiles tienen
la denominación M o MX y presentan mejores prestaciones. Otra vez en cuanto a
la memoria va a ser lo mismo, cuanta más mejor, pero aquí tenemos un problema,
ya que si hay mucha memoria, suele ser porque es compartida o dedicada, algo
que debemos evitar a toda costa, ya que eso quiere decir que nos quitará RAM de
nuestro ordenador y nos funcionará más lento.
En cuanto al resto de elementos, la mayor parte de los
ordenadores actuales los tienen todos, lo único que influye es la calidad, es
decir, podemos comprar ratones portátiles, altavoces periféricos, webcam… que
serán de mejor calidad de los que traen los ordenadores por sí mismos, pero
cada vez se trata de mejorar el hardware.
Por último, hay que ver que tipo de sistema operativo te
viene instalado. En el caso de un ordenador de Apple, si no quieres pagar más
por un Mac OX, sistema operativo propio de la marca, siempre puedes irte a
Linux, que es un sistema operativo que en la actualidad tiene distribuciones
gratuitas para todos los ordenadores, pero tienes que fijarte que no te cobren
más por ello. Normalmente, en ordenadores que no sean de la marca Apple, nos
encontraremos con Windows y, en la actualidad, con Windows 8, la última versión,
que puede que esté más orientada al uso táctil, por lo que se recomienda buscar
modelos anteriores, como puede ser el Windows 7 Ultimate.